¿Cómo ser una mujer elegante?

Y seguro lo primero que te preguntas es…¿qué es ser elegante?

La elegancia es saber estar. Es vestir correctamente para cada ocasión. Muchas veces se trata de un elemento innato en algunas mujeres que “nacieron para ser elegantes”.

Pero entonces, ¿no todas podemos ser elegantes? La respuesta es: sí. Solo que dependerá más de tu estilo personal, estilo de vida y de lo que tú desees proyectar de ti misma. Y serlo no es más importante que no serlo. No todas las mujeres buscarán ser elegantes todo el tiempo. Sino en momentos que así lo ameriten, por ejemplo.

Si sientes que no lo eres y no lo logras, no te preocupes. Hay tres cosas que podemos considerar si queremos ser elegantes:

Simplicidad, pulcritud y buen gusto.

Estos consejos te pueden ayudar a comenzar a trabajar en el tema.

NOTA: Lo más importante es ser constante.

La máxima de la elegancia es: “menos es más”

Lo que se traduce en no ir recargada. No es elegante llevar muchas cosas al mismo tiempo. Cuando tengas dudas párate frente al espejo y quítate algún elemento.

Ser elegante no tiene nada que ver con estar a la moda, ni seguir las tendencias

Ser elegante muchas veces va en contra de lo que “se lleva”.

Dile no a los brillos, colores estridentes y estampados grandes

La elegancia es simplicidad y los brillos déjalos para la noche.

Los estampados grandes y llamativos no van en concordancia con este estilo y los colores muy llamativas deben ser combinados de forma cuidadosa cuando se quiere ir vestida de manera elegante.

Si no eres experta en el tema, es mucho mejor decir NO.

No debes estar ni muy vestida, ni poco vestida

Atender el código de vestimenta es muy importante para desarrollar este aspecto.

Debemos entender qué significa vestir casual, coctel o formal. Es muy importante saber de qué se trata cada ocasión y responder de manera adecuada a ellas.

Nada tiene que ver con marcas o grandes presupuestos

Esto es un mito. La elegancia va más allá de una marca de alta gama. Porque puedes estar vestida de marca, pero si no tienes buen gusto….serás lo opuesto a lo elegante.

Ademas, el cómo hablas, te mueves y te expresas, es parte de tu Imagen Personal.

Con información de “El Libro del Estilo” de Antonio González.